Teoría presencia

La presencia significa habitar el aquí y ahora con plenitud, integrando cuerpo, mente, emociones, relaciones y espíritu. La presencia no es solo “estar”, sino estar consciente, conectado y disponible para la experiencia del momento.

1. Dimensión corporal

Anclajes físicos: gestos simples como apoyar las manos en el corazón o enderezar la columna ayudan a “aterrizar” en el presente.

Atención al cuerpo: sentir la postura, el peso en los pies, el ritmo de la respiración.

Movimiento consciente: yoga, tai chi, caminar lento o estiramientos, que alinean cuerpo y mente.

2. Dimensión mental

Actitud de observador: mirar la realidad sin necesidad de juzgarla, solo registrando lo que ocurre.

Silenciar el ruido: prácticas de meditación o mindfulness que entrenan a la mente a observar sin dispersarse.

Pensamiento enfocado: en vez de saltar entre preocupaciones, dirigir la atención a una sola tarea a la vez.

3. Dimensión emocional

Coherencia interior: alinear lo que piensas, sientes y haces en un mismo acto.

Aceptar lo que sientes: permitir que la emoción exista sin reprimirla ni exagerarla.

Respirar la emoción: usar la respiración como canal para soltar tensión.

4. Dimensión relacional

Sintonía energética: cuando tú estás presente, inspiras a otros a estarlo también.

Escucha activa: mirar a los ojos, no interrumpir, recibir al otro con atención plena.

Presencia compartida: estar de verdad con alguien sin distracciones tecnológicas ni pensamientos dispersos.

5. Dimensión espiritual/trascendental

Unidad: comprender que al estar plenamente presente, entras en contacto con algo más grande que tú mismo.

Conexión con lo eterno: recordar que el ahora es el único instante real donde habita lo sagrado.

Rituales de presencia: meditar, contemplar la naturaleza o agradecer antes de iniciar una acción.